miércoles, 28 de septiembre de 2011

Música para amortiguar el ruido


Entre 1945 y 1963 trabajó para la Radiodiffussion-Télévision Française
como productor de programas en español

Aprovecho esta ventana que tengo a la vida para airear tanto como pueda lo que me hizo ser y yace ahogado en silencio. No voy a hablaros de quién fue Salvador Bacarisse: ahí están la fuentes para consultar lo que queráis saber. El bueno de Salvador, compañero de destierro en París, compañero de luchas y resistencias y esperanzas, compuso una pieza enorme que quiero hoy compartir con todos vosotros. Su "Romanza" del Concertino para guitarra y orquesta (que me ha parecido oír como sintonía de algún programa de televisión cavernícola y apocalíptica) no ha conseguido nunca el éxito del Concierto de Aranjuez de Joaquín Rodrigo, pero no desmerece nada en la comparación. Cuando murió en un agosto parisino de 1963, había luchando mucho ya por los españoles, por la libertad y la dignidad humanas.


1 comentario:

  1. Gracias, José María, por acercarnos ese momento musical, por responder, a contratiempo, con este regalo sonoro que evoca esperanzas frustradas y la consecuencias mismas de su frustración. A contratiempo o a destiempo, si quieres: tú acercas a Bacarisse del pasado al futuro y yo a Mertens del presenta al pasado. Pero ambos habitan ya en el tiempo sin tiempo de la música, etérea, evanescente y ocupadora de todas las grietas. Salvador Bacarisse, como tantos otros artistas, vivió la esperanza de un florecer cultural y humano y también el mazazo de su aborto forzado. Vale la pena restaurar su memoria, que es la nuestra, la que ha historia impuesta ha secuestrado. Ideas “pentagrameadas” y tres fotografías que nos traen al músico en tres momentos de su vida, que debieron ser muy distintos.

    ResponderEliminar